La educación que un adolescente debe recibir no sólo es respecto a conocimiento académico, sino que también se le debe enseñar cómo sobrevivir ante los retos de la vida y aprender a ahorrar, debe ser fundamental.

Es un tema importante a tratar en casa, para que les sea más fácil administrar su dinero en la edad adulta. Pero, ¿cómo hacerlo? Aquí te damos algunas ideas.

Formas de enseñar a un adolescente a ahorrar

Anima a tu hijo a crear un plan de presupuesto

Deja que el adolescente escriba todas sus fuentes de ingresos y todos sus gastos, y explícale cómo funciona un presupuesto. Excluye las cosas que normalmente paga un padre o un adulto.

Tener un presupuesto o un plan de gastos puede ayudar a tu hijo a aprender cómo administrar sus gastos. También lo ayudarás a pensar en formas de ganar dinero para cubrir sus gastos y no empezar con una deuda prematura.

Enseña a tu hijo a realizar un seguimiento de sus gastos

Muéstrale cómo hacer un seguimiento de sus gastos y guardar los recibos de los artículos comprados.

Anotar los gastos y guardar los recibos puede ayudarlos a comprender mejor cómo gastan su dinero. También puede ayudarlos a decidir qué artículos no comprar la próxima vez para ahorrar dinero.

Entrega asignaciones mensualmente

Asegúrate de decirle que este dinero es para todo el mes y que es su responsabilidad hacer que no se termine antes.

Una asignación mensual puede ayudar a tu hijo a presupuestar su dinero, y es importante que te asegures de que dure hasta la próxima vez que reciba una asignación. Tendrás que ser firme para no dar dinero extra si tu adolescente gasta todo su dinero antes de tiempo.

Sin embargo, también ten en cuenta que tu hijo puede cometer errores y que debes ayudarlo a evaluar la situación y ayudarlo a comprender cómo puedes hacer las cosas mejor la próxima vez.

Anímalo a encontrar un trabajo a tiempo parcial

Así lo pensarán dos veces antes de gastar el dinero que ganaron a través de su propio trabajo duro.

Habla con tus hijos sobre qué tipo de trabajo pueden hacer. Discute las horas de trabajo: asegúrate de que el trabajo a tiempo parcial no interfiera con el tiempo familiar o la escuela.

Habla sobre impuestos y ahorros y alienta a tu hijo a ahorrar primero una parte de sus ganancias, antes de gastar.